Todos hemos oído hablar y seguro que te haces una idea de lo que es, ¿pero sabes exactamente en qué consiste y cómo afecta a las relaciones de pareja? En Perfect Love VIP le damos una gran importancia porque está demostrado que tiene una influencia directa a la hora de encontrar tu media naranja.
Si bien es cierto que hay muchas formas de definir lo que es la inteligencia emocional, existen aspectos comunes que todos podemos identificar como importantes para las personas: entender las emociones. Y es que este tipo de inteligencia no se basa en las cosas que se pueden aprender o repetir de memoria, sino que se base en la identificación de las diferentes emociones que experimentan las personas y cómo gestionarlas en el contexto de la pareja.
Independientemente de que tengas pareja o no, la habilidad de reconocer las emociones propias es fundamental para mejorar tu comportamiento, ya no solo por tu propio bienestar sino por la imagen que proyectas hacia el exterior. En caso de que respondas a los estímulos de forma inadecuada en tanto en cuanto a lo que sientes, puedes tener reacciones que a corto y medio plazo van a ser perjudiciales para ti.
En esa misma línea, el autoconocimiento es fundamental para saber qué puede esperar una pareja de nosotros y cómo desenvolverse en ese día a día compartido. No olvidemos que aunque nos comportamos de manera diferente si estamos solos o acompañados, la realidad nos dice que el desempeño habitual tiene una incidencia directa e nuestras habilidades sociales.
Existen muchas personas con problemas de inteligencia emocional, y es que es un aspecto al que tradicionalmente se le ha dado menos relevancia de la que realmente tiene, mientras que otros tipos de modos de aprender se han fomentado en los centros educativos, desde las edades más tempranas hasta los mayores.
Sin embargo, poco a poco las investigaciones van arrojando luz al respecto y ya sabemos que es imprescindible hacer hincapié en esta clase de aprendizaje, tanto para el desarrollo personal como para relacionarse (con éxito) con otras personas. Identificar cómo se siente la otra persona y actuar en consecuencia permite mejorar las interacciones sociales, ya sea a nivel amistoso o amoroso.
En los últimos tiempos hemos podido ver que los docentes cada vez dan una mayor relevancia a este aspecto, de forma que se va incorporando al método de enseñanza más convencional. Así se convierte en una habilidad que, si se desarrolla desde niños, puede influir positivamente a la hora de relacionarse con los demás y, por supuesto, mejorar las parejas.
Como es obvio, esa labor de instruir en términos de inteligencia emocional debería comenzar desde edades tempranas, incluso desde bebés. Pero los adultos también pueden poner de su parte para tratar de mejorar en ese aspecto. Vivir cada momento siendo conscientes de que estamos en el presente, liberándonos del lastre del pasado y sin obsesionarnos con el futuro, es primordial para comprender cómo nos sentimos en cada momento.
En una sociedad en la que parece que llevamos un ritmo de vida donde no se puede parar ni un segundo, siempre haciendo o mirando algo, no vendría mal pararse de vez en cuando y reflexionar sobre los comportamientos de uno. Eso puede permitirte entender mejor cómo funciona tu relación y que puedes hacer para mejorarla.
Ya hemos hablado aquí alguna vez de la importancia de la empatía, no solo para conocer mejor a tu pareja sino a valorar cómo puede recibir tus propias palabras o comportamientos. Manejar esa imagen que proyectas al exterior es fundamental si quieres que los demás te vean como realmente eres, una de las premisas clave para que una relación de pareja funcione a pleno rendimiento. En cambio, si no tienes en cuenta los sentimientos que generas en los demás, no solo puedes hacer daño sino que puedes llegar a romper vuestra unión.
En definitiva, la inteligencia emocional desempeña un papel fundamental en las relaciones sociales y, por supuesto, en las relaciones de pareja. Aprende a escuchar lo que dicen los demás y trata de incorporarlo a tu forma de pensar las cosas, ya que a través de ese filtro podrás comprender mejor por lo que están pasando a tu alrededor cuando dices o haces algo.